Soy una mujer colombiana, con acondroplasia, el tipo más común de enanismo que existe. Soy escritora, conferencista motivacional, maestra y músico. En este blog comparto mis reflexiones, escritas para cualquier persona que quiera vivir a la altura de las circunstancias, a la vez que sirve para transformar las miradas de la sociedad, frente a las diferencias y la discapacidad; y así logremos un mundo más equitativo, incluyente, donde predomine el respeto y la dignidad hacia cualquier persona.
lunes, 10 de enero de 2022
CUANDO UN ARTISTA MUERE
Cuando un artista muere, se reviven sus canciones, se embellecen sus pinturas, resucitan sus personajes, se hace inmortal su obra, aún aquella que no conocían.
Cuando un artista muere, algo se rompe dentro, lloran los recuerdos que evocan sus personajes, su música o su literatura.
Cuando un artista muere, se mira un poco al pasado, se rescata lo olvidado, se cuenta su historia y es como si naciera de nuevo en la memoria.
Cuando un artista muere, pareciera que a la tierra le cortaran un árbol que en su tiempo dio muchos frutos, pero ya no disfrutaremos de los frutos nuevos.
Cuando un artista muere, pierde la tierra un poco de magia y de sensibilidad; se le va un ser que fue capaz de transformar un sentimiento o una emoción, en una obra, pintura, poema o canción.
Cuando un artista muere, queda un vacío que nadie podrá llenar; se cierra el telón, se callan las voces y los instrumentos, no hay más pinceladas, se escribe punto final.
Cuando un artista muere, en realidad no muere, habitará por siempre en cada letra o melodía; en los colores de sus pinturas o en las escenas de sus películas.
Cuando un artista muere, queda huérfano el espectador, pero vive su legado y su arte lo hace inmortal. KR
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