(Kary con Mafe */* Te adoro Ahijadita)
Y en esta reflexión y en el compartir con los demás Maestros de la Institución, surge:
GRANDEZA VS SUPERIORIDAD, PEQUEÑEZ VS INFERIORIDAD
En la necesidad y ansiedad de sentirnos superior, escogemos como parámetro para medir, la fragilidad y pequeñez del que está a nuestro alrededor, a tal punto que llega a ser lo único que intentamos en los demás descubrir. Por eso es común que la humanidad, se encuentre al asecho del que se equivoca o ha de fallar; es más fácil señalar y criticar, burlarnos y ridiculizar, esto es lo que aparentemente ayuda a que el otro en ese sentirse inferior, se ubique en una mejor posición, pero de fondo realmente otra es su situación. Si lo que interesa es sobrepasar del otro su nimiedad y debilidad, efectivamente es poco lo que se desea poder alcanzar; todo ello demuestra que la visión tiene corto alcance, se es mediocre en el vivir, se prefiere acomodarse en la posición del que destruye porque realmente no sabe erigir; implica menos esfuerzo y compromiso el lanzar una palabra o un gesto que hiera y logre devastar, que buscar lo mejor de sí mismo, para entregarlo, comprometerse y edificar.

Por eso disfruto mi pequeñez y sencillez, que me permiten contemplar del otro su grandeza interior, de este modo en la medida en que me esfuerzo por levantar mi mirada y buscar en lo más profundo lo que guarda su corazón; puedo encontrar en su fragilidad, el toque de Divinidad que deja en él su Creador. Sentirme pequeña me permite esforzarme un poco más por alcanzar lo que quiero y con mis manos poder palpar; es estar segura y comprobar una vez más que crezco en la medida que con mí vivir, hago crecer a los demás. Por ello, no es lo mismo Grandeza que Superioridad, ni Pequeñez que inferioridad.
3 comentarios:
"la grandeza se esconde aún en lo más pequeño, en lo que a veces pasa desapercibido y para verlo hay que mirar mas allá"
Qué verdad tan grande y tan sublime.
Te he encontrado a traves de un enlace en el blog de una amiga. Un gusto en conocerte.
Un abrazo y bendiciones
Jose
Gracias Jose...me emociona que me visites y lo que dices, un abrazo grande...
Mis primos y yo también nos medíamos con mi abuela Aurelia, que era muy bajita (no sé cuento exactamente, pero al sentarse le colgaban siempre los pies). A ella le encantaba que nos midiéramos con ella para ver cuando la superábamos... en estatura, porque en lo demás, era una mujer muy difícil de superar.
Genial la reflexión, como siempre.
Rosa.
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